1RA PARTE de la TRILOGIA
" NEO LIBERALITO"
1: Cantata de los 2 piratas o el pirata de 2 cabezas (SCIOLI - MACRI)
2: Dos, pero no dos (MACRI - ALBERTO)
3: Seguimos En el horno y nos quemamos. (BULLRICH - MASSA - MILEI) PELUCA DEMENTE PRESIDENTE.
(Me importas tú y yo y el, el pueblo soberano, si señor)
BOLERO Anti Liberfacho
Popularizado por el trio Los Panchos liberfachos o los choripanes neoliberales
Andá pa’ ya Boby Capo!
NUEVA LETRA:
De Francisco Alvero
EL JUGLAR de la libertad
“Ni halcones ni palomas, ni buitres ni leones,
Ni zorros ni gallinas, primero la Argentina”
…Del trío Los Panchos LiberFachos
o Los choripanes neoliberales
… Son una maza, una borracha y un pelado
que andan por ahí pululando
Sin olvidarnos, claro, del Neo liberalito
de la mátrix recargado.
El “peluca” y el pirata amarillo…
y muchos, muchos más
Que andan dando vueltas
como caranchos por su rancho.
Pa’ quienes naturalizan la pobreza,
La injusticia y también desigualdad
Este canto abolerado los presenta,
Piel de ovejas, lobos en la intimidad
No queremos ya ni halcones ni palomas,
Menos buitres, zorros, gallinas, leonas
Zoológico anti patria estos cabrones,
Lo peor de la Argentina, es la verdad
Pagarle al fondo, al fondo,
al fondo monetario es prioridad
Qué duda cabe, que duda, que duda,
Consenso liberal
¡Con el hambre no se juega,
jamás lo debemos permitir!
La realidad, es la, es la,
es la única verdad
Tan soló, tan sólo del pueblo depende,
Cambiar esto, cambiar esto de raíz
Pronto, pronto, codo a codo, mis hermanos,
porque tenemos derecho a ser feliz
Y ser feliz, feliz, feliz,
felices con lo propio y nada más
No hay más secreto,
que ser, que ser, ¡Felices de verdad!
Son leones, piel de ovejas,
Que al pueblo van a desollar
La realidad, es la, es la,
es la única verdad
Es la única… es la única …
es la única … es la única verdad
El desafío de la izquierda ante el avance de Milei
Voto joven: "La rebeldía sigue siendo de izquierda"
El avance de la ultraderecha podría desplazar a la izquierda como tercera fuerza política en las próximas elecciones. ¿Cómo evitarlo? La mirada de Myriam Bregman, Gabriel Solano y la generación más joven de Luca Bonfante y Tatiana Fernández Martí. Del "dar el debate franco" a ir a buscar a las y los jóvenes "a las redes".
El fantasma de la descompuesta extrema derecha del partido de Javier Milei, Avanza Libertad, y sus acólitos arrancando el puesto de tercera fuerza política para las próximas elecciones a la izquierda recorre las filas de los partidos del Frente de Izquierda Unidad. Página12 conversó con dos generaciones de militantes trotskistas que planean disputar ese lugar con argumentos para "desarmar la pose falsa de la narrativa liberal", porque coinciden en que "la rebeldía nunca puede ser de derecha". Myriam Bregman opinó que "el discurso anticasta de Milei es una pose para empalmar con el enojo a los políticos tradicionales, cuando él es un empleado de las grandes corporaciones, un títere del poder económico, nosotros no somos títeres de nadie". Para Gabriel Solano, "hay que mostrar que arrasarían con los derechos laborales y sociales, y privatizarían la salud y la educación". En tanto, los jóvenes Luca Bonfante y Tati Fernández Martí expresan que los supuestos libertarios "no son rebeldes sino defensores de privilegios", y que la presencia de la izquierda "en todas las luchas de la juventud" los respalda "para ir a un debate franco y sincero con esos jóvenes, y a ganarlos en esta batalla", respectivamente.
La escena ocurrió a principios de febrero, en un corte de las organizaciones sociales en Puente Pueyrredón, cuando el hijo de 19 años de una militante del Partido Obrero (PO) le dijo al dirigente de ese espacio, Gabriel Solano, que no sabía si votaría a Milei o a la izquierda. Luca Bonfante, de la misma generación del pibe, no duda:
--Tenemos los ejes para convencerlo --dice a este diario. De 24 años, representante estudiantil en el Consejo Directivo de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, colaborador de La Izquierda Diario y militante del Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS), afirma: "Hay que cuestionar esa idea de que la juventud o la rebeldía es de derecha". Dice que su generación vivió la crisis internacional del 2008, la pandemia, y la inflación altísima que te desorganiza la vida. "En Argentina el 70% de los jóvenes trabajamos en condiciones de precarización extrema, desde la última dictadura todo eso se profundizó y ningún gobierno dio respuesta, es lógico que la juventud no encuentre las respuestas a sus problemas en los partidos que vienen gobernando desde siempre".
A su criterio, el fenómeno de ultra-derecha de Milei es similar a Vox en España. "Hablan de la 'casta política', de la 'libertad', sostienen que los pocos derechos laborales que quedan son 'trabas' para los empresarios, se apoyan en un malestar existente, pero para defender los privilegios de los sectores más ricos de la sociedad", apunta. "Para ellos el problema no es que un puñado de empresarios se la lleve en pala mientras hay gente comiendo de la basura, o que se le pague al FMI cuando hay colegios que se caen a pedazos, no son rebeldes sino defensores de privilegios, por eso tienen asegurada la manija en los medios y el financiamiento de sus campañas", agrega.
Para Luca Bonfante, esta expresión política no es la única que surgió estos últimos años, también hay expresiones por izquierda: "En Chile la juventud salió en masa a enfrentarse al régimen neoliberal; en Colombia, Perú y Ecuador también hay levantamientos, el movimiento Black Lives Matters en Estados Unidos, y acá en la Argentina la experiencia del Frente de Izquierda Unidad es importante también, se ubicó como tercera fuerza nacional en las últimas elecciones y tiene figuras muy destacadas como Bregman, Del Caño y Vilca", describe. Y deja planteado el desafío: "Tenemos la tarea de no regalarle la juventud a la derecha y mostrar que la salida es por izquierda, el peronismo no puede interpelar a estos jóvenes porque durante este gobierno las condiciones que empeoran la vida de la juventud se profundizaron".
Tatiana Fernández Martí --21 años, consejera estudiantil en el Consejo Directivo de la Facultad de Filosofía y Letras, expresidenta del Centro de Estudiantes del Colegio Nacional de Buenos Aires y militante LGBTI+ en la agrupación 1969 del PO--, define: "Nuestra estrategia política para demostrar que Milei no es rebeldía ni antisistema es la explicación, vamos a derribar los mitos de la narrativa liberal porque hace caer a la juventud en una trampa, lo que él intenta instalar esconde un programa muy reaccionario, derechista y dañino para los jóvenes".
La joven afirma que el partido Avanza Libertad "habla de un 'estado mínimo' en base a la teoría minarquista, hay qué pensar que esto significa que el Estado deje de financiar a la educación pública, que avance la educación privada". Y se pregunta: "¿Eso es positivo para la juventud teniendo en cuenta que un 60 por ciento está afectado por la pobreza?" Lo mismo sucede cuando Milei pide reforma laboral. "La mayoría de los jóvenes ingresa al mercado laboral con sueldos por debajo de los 100 mil pesos, con jornadas de más de 8 horas, sin cobertura médica, ¿es positivo arrancarles todos los derechos laborales? No".
Milei sostiene que el calentamiento global es una mentira del comunismo. "¿Ese negacionismo es rebeldía? ¿Es positivo dejar avanzar la depredación sobre el ambiente para una generación que ya está viviendo las consecuencias? Para nosotros no, la rebeldía es organizarnos para tirar abajo este régimen de explotación y transformar la Argentina sobre nuevas bases sociales, bajo las banderas del socialismo", se planta Fernández Martí. Y anuncia que irán "a ir a buscar a todos los jóvenes para explicar esto, en los trabajos, los lugares de estudio y también en las redes sociales; otros sectores no pueden ir a explicar esto, los que se embanderan como defensores del Estado presente y gobernaron en el último tiempo privilegiaron los intereses de una pequeña minoría por sobre las mayorías, porque eso es lo que provoca el descrédito de la política y permite que se instale y avance un discurso derechista".
Gabriel Solano --48 años, diputado de la Ciudad por el PO-FIT U-- insiste: "La izquierda tiene que ponerse las pilas y expresar la bronca contra el gobierno y el conjunto del sistema, esa bronca no la expresa Juntos por el Cambio porque ya gobernaron, entonces la izquierda tiene que salir a refutar toda la argumentación de Milei y los libertarios, mostrando que de gobernar ellos serían arrasados los derechos laborales, sociales, se privatizaría la salud y la educación". Desde el punto de vista comunicacional, Solano entiende que "hay que golpear duro al gobierno y a todo el régimen, no ser condescendientes, no parecer como parte de la casta de izquierda, por eso insistimos en una izquierda que se plante y no una light que solo pide votos para tener más parlamentarios va a ser asimilada a la pata izquierda del sistema".
A fin de marzo saldrá su libro Por qué fracasó la democracia (Planeta). "Por los 40 años que se cumplen desde el inicio del período democrático, vamos a dar una explicación de fondo del fracaso de la democracia capitalista, que no ha cumplido con sus promesas de que con ella se come, se cura y se educa del alfonsinismo, sino que al revés, endeudó al país, aumentó la pobreza, la precarización laboral y la crisis habitacional. Vamos a demostrar que la lucha real contra el sistema viene de parte nuestra", señaló Solano.
Milei es Menem recargado
Para Bregman --51 años, madre, diputada nacional PTS-FIT U, y abogada de derechos humanos-- ,"la rebeldía nunca puede ser de derecha porque la derecha se basa en reforzar el orden conservador establecido, y cuando los sectores populares y las mujeres avanzan trata de restaurarlo, son ideas que embellecieron a políticos ultraconservadores con mucha inversión mediática y de marketing para que aparezcan como alternativa ante el desencanto que hay con la dirigencia política tradicional". La legisladora admite que es difícil enfrentarlos porque "es complejo contar con tanto apoyo mediático y económico como tiene Milei". Sin embargo, afirma que le consta que "hay un gran desconocimiento sobre sus verdaderas ideas, por eso la clave es dar a conocer su ideología profunda, llega el peinado, el enojo y voy a quemar el Banco Central, que lo muestra como contestatario cuando en realidad todas sus ideas atrasan 150 años en derechos sociales, laborales y de género".
En su definición, "Milei es un Menem recargado, sus ideas económicas son las de Cavallo, la dolarización que plantea es Cavallo con fiebre, es profundamente misógino, sus modelos son el trabajo basura sin derechos, la educación privada con escuelas voucher, la jubilación chilena que fue cuestionada por las masas en las calles". Y enfatiza: "Hay que enfrentarlo, nunca lo mostramos como alguien simpático, nunca somos amigables sino que mostramos que es nefasto, lo hice en el debate de candidatos de CABA y fue importante, ahora se confirma todo esto porque en las provincias se está aliando con lo más rancio del orden conservador, con los Bussi de Tucumán y el Partido Demócrata en Mendoza, además de Villarroel que defienden el genocidio, a los represores y torturadores de 30 mil detenidos desaparecidos".
Cele Fierro --37 años, madre y dirigente del MST Nacional en el FIT U, tesista en la Carrera de Trabajo Social-- dice a Página12 que van demostrar que "no hay ninguna rebeldía en Milei ni en su proyecto, la realidad es que es una síntesis de Menem y Cavallo". Y afirma: "La realidad mata el relato de los libertarios, ellos niegan el cambio climático y defienden a las patronales explotadoras, pero la juventud que se rebela y defiende los territorios contra el extractivismo y se organizan contra la precarización laboral". Para Fierro, será "una disputa ideológica, una batalla cultural intensa, profunda, para explicar con militancia entre los trabajadores jóvenes, en el movimiento estudiantil y en los barrios, que Milei y sus libertarios son reforma laboral para sepultar los pocos derechos que quedan, privatización educativa y de salud, supresión de programas sociales, negacionismo delirante del cambio climático y defensa de la ´peor´ de las castas: la empresaria, la de las corporaciones".
La dirigente considera que "no nos queda otra que desenmascarar el chamuyo sobre-actuado, con nuestros propios planteos alternativos: reducción de la jornada a 6 horas, con salario igual a la canasta y en blanco. Para terminar con la corruptela estructural, reforma política y judicial integral: que toda la casta gane lo mismo que una directora de escuela, sea revocable y esté obligada a usar lo público, sobre lo que decide". También marcarán que "nada de salvadores mesiánicos individuales: organización colectiva, desde abajo, anticapitalista y socialista, con la izquierda. Tenemos que hacer una pedagogía incansable y constante. Somos miles de militantes y simpatizantes en la izquierda: si actuamos como movimiento político unitario en la diversidad, podemos derrotar a los liberfachos".
Demoliendo mitos
Uno de los encargados de la comunicación del FIT U, que prefirió no ser mencionado, destacó que es clave tomar los cliches de Milei en términos de rebeldía, libertad y anticasta, porque "son desarmables en tanto que son mitos libertarios que forman parte de un doble discurso, donde su programa va por un lado y su discurso va por otro". En su mirada, "al hablar con les pibes les hacés la discusión en la calle, les explicás y al toque se dan cuenta que Milei es puro chamuyo". Pero ante todo sería fundamental también aclarar qué ideología van a desmitificar.
"Ni siquiera son libertarios, son fachos", dijo el dirigente del PO Néstor Pitrola en el canal IP, en un panel donde estuvo la joven militante que denunció pedidos de dinero y acoso sexual en el espacio de Milei. "Esto se expresa en su cuestión mesiánica, es una estructura autocrática contraria a cualquier idea liberal, tampoco es muy liberal cerrar acuerdos con elementos de la dictadura ni estar contra los derechos de las mujeres, en nuestro caso como socialistas las mujeres se organizan ellas mismas por su emancipación, la casta son los políticos capitalistas, la corrupción que denunció ella (Mila Zurbriggen) es histórica", expresó Pitrola.
Jóvenes liberales con zapatos, pantalón y camisa de tonalidad clara. Otakus con pines en sus morrales. Madres e hijas, católicas o cristianas identificadas con el pañuelo celeste de la campaña “Salvemos las dos vidas”. Un veinteañero conversa sobre la charla informativa que había tenido ese día para ingresar a estudiar a la UCEMA, mientras lo escuchan atentos un joven de cuerpo menudo con una mochila de la empresa que lo acababa de traer de su viaje de egresados y otro de mirada aniñada que luce una gorra roja con el eslogan de Donald Trump, “Make America Great Again”. Parejas heterosexuales de clase media. Anarcocapitalistas y libertarios con camperas de cuero y brazaletes con la bandera de Gadsen. Metaleros. Algunos personajes corpulentos con remeras con leyendas “Anti Che” y “No fueron 30.000”. Un treintañero con la palabra “Disciplina” tatuada sobre su nuca. Poca gente que pasa los cuarenta años. En la esquina, la mesa del Partido Libertario, que postula a la presidencia al economista José Luis Espert, junta afiliaciones y reparte volantes con sus propuestas: reducción del gasto público y “voucher educativo”, al estilo chileno.
Aquella tarde del jueves 14 de marzo, cerca de mil trescientas personas llegaron al barrio de Belgrano para escuchar al economista Javier Milei, al politólogo Agustín Laje y al abogado Nicolás Márquez, quienes se parapetan hoy como los intelectuales de una derecha que interpela a muchos jóvenes por medio de intervenciones misóginas, individualistas, conservadoras, violentas, homofóbicas y reaccionarias, disfrazadas de un ethos irreverente, un discurso liberal y una pose anti statu quo. El año pasado, Laje y Márquez ya habían colmado el salón Borges de la Feria del Libro y el tradicional Club Español de la Ciudad de Buenos Aires, mientras que el economista hizo lo propio con su obra teatral El consultorio de Milei. Su éxito no es solo local: Laje y Márquez presentaron su best seller El libro negro de la nueva izquierda por varios países de la región. El libro editado en 2016 por el pequeño sello Unión (también editor de Milei) lleva vendidos 20.000 ejemplares en la Argentina y ocupó los primeros puestos en el género “política” en Amazon. Como otros referentes de la alt right a nivel mundial y regional –Ben Shapiro en los Estados Unidos, Milo Yiannopoulos en Inglaterra, Gloria Álvarez en Guatemala o Alex Kaiser en Chile– este trío de “héroes”, según los definía el trailer1 que invitaba a la conferencia, son virulentos en sus intervenciones y le dan una apariencia academicista a sus ideas reaccionarias. Su defensa de la “libertad individual” apunta contra lo que estos personajes consideran ataques de parte de distintas formas del “colectivismo”: el estatismo, el progresismo, el “marxismo cultural” y el feminismo, un otro amplio y polisémico que, aunque no sean nacionalistas, lo consideran resultado de la intromisión de ideas foráneas. El siempre presente enemigo internacional, que cambia sus rostros pero no sus mañas.
Con una entrada a precio similar al de una salida al cine, la conferencia titulada “Nuevos ataques contra la libertad” fue organizada por el centro de estudios de jóvenes de derechas “Cruz del Sur”, presidido por Segundo Carafí1, exfuncionario del PRO en la ciudad. El ticket podía adquirirse a través de Plateanet y el anuncio de los “tres héroes” compartía cartelera con los shows de la sexóloga Alessandra Rampolla y el comediante Jey Mammon, el recital del Chaqueño Palavecino y los monólogos de Enrique Pinti, entre otros.
Además de la diversidad de looks y la cantidad de millennials no encuadrados partidariamente, quienes ocupaban las primeras filas del auditorio reservadas para los invitados especiales revelaban el alineamiento de esta joven generación de influencers con el tradicional espectro de la derecha argentina que considera como “progresista” o de “centro izquierda” al gobierno de Cambiemos.
En el evento de diciembre en el Club Español, mientras lanzaba críticas demoledoras sobre la actual gestión, Laje reincidiría dos veces en el “fallido” de pronunciar “kirchnerismo” en lugar de “oficialismo”: “Disculpen, es que son tan parecidos que se me confunden”, se excusó ante un público que celebraba la destreza del joven cordobés para salir airoso de sus propios lapsus.
Detrás del show que brindan estos personajes que se definen como liberales, pululan los ya conocidos representantes de agrupaciones destacadas de afinidades reaccionarias. La causa militar se mantiene como eje central de estas voluntades y converge con la “ola celeste” antiderechos formando un continuum que el diputado del PRO Nicolás Massot había resaltado en su intervención3 en el debate por el aborto en junio del año pasado: “En ese momento no nos animamos a tanto”.
Desde el lado de los defensores de la represión militar y sus agentes, las dirigentes de agrupaciones de familiares Cecilia Pando y Silvia Ibarzábal, los abogados de Justicia y Concordia representados por Alberto Solanet y Ricardo Saint Jean, el flamante candidato militar de la derecha y ahora exfuncionario de Cambiemos Juan José Gómez Centurión, el abogado y analista financiero Carlos Maslatón y el economista de la UCEMA Agustín Monteverde comparten filas con el pastor Gabriel Ballerini, el periodista de La Nación Mariano Obarrio y otros referentes más jóvenes de la causa provida y también influencers, como el abogado Francisco Oneto y el cantante y conductor Emmanuel Danann. Mientras las personalidades invitadas y el público conversaban y se acomodaban, la pantalla gigante del anfiteatro proyectaba videos de las intervenciones mediáticas más resonantes de los conferencistas, musicalizadas por una melodía de película de ciencia ficción que precalentaba el clima en el auditorio y subía la ansiedad. También se proyectó un repaso por algunos de los discursos políticos que circularon respecto del debate sobre el aborto: Cristina Kirchner, Mauricio Macri y Marcos Peña fueron los más silbados. El video culminaba con la leyenda “Gracias senadores”.
Hasta el momento y a diferencia de lo que sucedió en Brasil, no existe un armado político sólido que integre a estas voluntades para enfrentar a Macri por derecha: la precandidatura presidencial del diputado Olmedo fracasó rápidamente, aunque en los últimos días la dirigente evangelista Cynthia Hotton relanzó su espacio4 “Valores para mi país”. Más allá de su eventual correlato partidario por ahora lejano, Milei, Laje y Márquez materializan espacios concretos y, por medio de posteos en las redes, de libros que se venden y mucho y de conferencias al estilo TEDx, logran sintetizar sentimientos de muchos jóvenes que se piensan antisistema y que despotrican contra lo que definen como “políticamente correcto” mediante una narrativa ultra conservadora y a la vez rupturista.
Las intervenciones de los representantes locales de la alt right emularon la performance de un stand up: caminaron sobre el escenario, conservaron el ritmo y alternaron entre una pedagogía de la información, el fetichismo del “dato duro” y un repertorio de chistes que apuntó directo a la risa del espectador.
Milei, anarcocapitalista rothbardiano, consideró que lo que cada uno haga dentro de su círculo es un problema propio, siempre que el otro no sea obligado a respetarlo, a ser sostenido con los impuestos o a ser interferido por la acción estatal. Su antiestatismo vociferado a los gritos se tornaba ridículo y repetitivo al no tener interlocutor.
Sin desmedro de la dinámica standupera, quieren ser reconocidos como intelectuales y, en buena medida, Gramsci les da la derecha. En su célebre ensayo Los intelectuales y la organización de la cultura (1921), proponía distinguir al intelectual del que no lo era, tomando como medida no el “esfuerzo nervioso muscular” o la calidad intrínseca de las obras de un agente, sino considerando la función social que este ocupa en determinado espacio. Ideas, densidad y Milei al margen, tanto Laje como Márquez intentaron corporizar los gestos, poses y actitudes que la investidura exige. En el evento de diciembre, mientras un tercero los introducía y hacía gala del capital simbólico (títulos académicos, becas y libros) sobre el que se sustentaría el reconocimiento que demandan, ambos aguardaron en silencio con la sobriedad justa: mirada adusta, rostro levemente apoyado sobre las manos entrecruzadas, brazos dispuestos en “V” invertida y codos sobre la mesa.
“Yo soy un obsesivo con los conceptos”, le advirtió Laje al público joven meses después en la cita en el Auditorio de Belgrano. Allí se permitió discutir con algunas teorizaciones de Benegas Lynch (padre) sobre la noción de “libertad” dejando en claro que, al menos en sus cavilaciones internas, se codea con intelectuales. Con esa tónica, propuso lo que llamó un “ejercicio conceptual”, que consistió en una relectura de Marcuse, Adorno y otras referencias del marxismo frankfurtiano para alertar a los jóvenes sobre las nuevas formas de penetración ideológica de una izquierda que, según él, cambió el fusil por el “pañuelo verde”, el “estatismo” y la “ideología de género”. Sus referencias académicas fueron acompañadas por fake news y notas exageradas (como la de una mujer norteamericana que se “casó” con una estación de tren) con la pretensión de evidenciar con “datos” los avances del Estado sobre el individuo y la familia.
Márquez, autor que antecedió a Yofre y Reato en la publicación de libros que reivindican la versión militar de la dictadura, calificó de “dictador pedófilo” a Perón y de “paródicos y sin garantías jurídicas” a los juicios a los militares, que “defendieron la Nación”. La alocución de Márquez era seguida por adolescentes que probablemente escuchaban por primera vez una defensa tan explícita del terrorismo de Estado y expresaban incomodidad con movimientos inquietos. Como en el evento de diciembre en el Club Español, Márquez se referenció en el pensador antisemita francés Charles Maurras para promover una articulación pragmática entre las fuerzas que históricamente caracterizaron a la derecha argentina con el objetivo de “defender nuestra tradición cultural cristiana”. Los casos de Vox en España, Liga Norte en Italia y Agrupación Nacional en Francia fueron tomados como horizonte para Márquez, que manifestó tener la esperanza de ver en la Argentina “liberales que crean en la vida desde la concepción, conservadores que crean que la tradición tenga que estar al servicio del progreso y nacionalistas que no confundan el amor a la patria con el amor al Estado”. Su conferencia finalizó con un guiño a Gómez Centurión, quien lo aplaudió desde la primera fila.
Las causales que explican este furor son varias. Un factor a tener en cuenta es que Laje y Márquez tenían una intensa actividad desde hacía años, pero fue el álgido debate en el Congreso sobre la legalización del aborto, entre mayo y agosto de 2018, el acontecimiento que allanó el terreno para que sus intervenciones tuvieran otro espesor y dieran lugar a nuevas articulaciones con redes evangelistas y católicas, fundaciones, think thanks de derecha y agrupaciones “libertarias”. El despliegue de la “ola celeste” se anudó, a su vez, con el deterioro de las variables macroeconómicas y con la orientación política de un gobierno que genera incertidumbres y descontentos de izquierda a derecha. La formación de puntos de vacancia e impasses culturales que no pueden ser suplidos con los valores, visiones y marcos de interpretación del oficialismo, ni desde ya con las retóricas del variopinto arco opositor, habilita que la virulencia y el “lenguaje de odio” con que se expresan estos personajes en redes sociales pueda materializarse en espacios que se despliegan y al mismo tiempo trascienden el plano virtual, y que encuentran eco en una fracción ecléctica de jóvenes que hoy asiste a estos eventos en busca de referencias. Es cierto que más allá de las formas en que se materializa este espacio, en sus modos de presentación y en la singularidad de sus personajes, no hay nada muy nuevo bajo el sol de la derecha. Sin embargo, existen jóvenes que efectivamente se sienten interpelados por los discursos y por los modos en que estos personajes intervienen públicamente en un contexto de crisis económica y de virulencia que trasciende las redes sociales. Esto nos obliga a salir del microclima que minoriza estas expresiones y a prestarles atención, sin sobreestimarlas ni subestimarlas, sin hacer un consumo irónico de ellas.
Notas
1 Márquez, Laje, Milei – Trailer «Nuevos Ataques a la Libertad» https://www.youtube.com/watch?v=Se8d6LZJ9X4.6M,
2 Perfil de Segundo Carafí en twitter: https://twitter.com/segun_carafi?lang=es.
3 Véase: El “nosotros” de Massot. Recuperado de: https://www.pagina12.com.ar/121326-el-nosotros-de-massot.
4 Véase: Cynthia Hotton y Gómez Centurión encabezaron el lanzamiento de un partido «pro-vida». Recuperado de: https://www.infobae.com/politica/2019/03/28/cynthia-hotton-y-gomez-centurion-encabezaron-el-lanzamiento-de-un-partido-pro-vida.
Ezequiel Saferstein
Doctor en Ciencias Sociales (FSOC-UBA), magíster en Sociología de la Cultura y el Análisis Cultural (IDAES-UNSAM) y licenciado en Sociología (UBA). Docente e investigador asistente CONICET con sede en el CeDInCI/UNSAM.
Analía Goldentul
Licenciada en Sociología y maestranda en Estudios Sociales Latinoamericanos (FSOC-UBA). Es investigadora del Grupo de Estudios de Sociología Histórica de América Latina (GESHAL). Desde 2015 es becaria doctoral del CONICET.
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